lunes, 24 de marzo de 2008

LA METODOLOGIA DE LA SEGURIDAD INDUSTRIAL

Siempre hemos observado que una de las grandes fallas del personal responsable de la seguridad industrial es la improvisación debido a que desconocen las metodologías necesarias para corregir, modificar y educar el comportamiento inseguro de los trabajadores. El empleador al momento al momento del diseño de una empresa debe utilizar métodos para controlar las condiciones inseguras del trabajo. La metodología de seguridad es totalmente distinta a la efectuada para las personas, el ambiente o el producto, hoy en día un gran volumen de empresas invierten importantes sumas de dinero en seguridad con la intención de asegurar el proceso, las personas y el ambiente. Claro esto por general se consigue con la mejora continua, con eficientes planes de mantenimiento que apoyen cualquier modelo de prevención de riesgos, es de hacer notar que dichos métodos deben reflejar las legislaciones de cada estado o provincia, leyes y estatutos que fortalezcan la gerencia de riesgos. Estos diseños deberán contar con programas de auditorias, entrenamiento y planes de inversiones anuales, así mismo se deben incorporar software que minimicen los errores humanos, ya que por lo general las decisiones que toma el ser humano en momentos de emergencia son del tipo cualitativo, ya que no hay tiempo muchas veces de lógicas ni de razonamientos cuantitativos. Algunas de estas técnicas utiliza los análisis de costo – beneficio mediante la cual se estudia el comportamiento de la disminución de riesgos y accidentes en comparación con la inversión realizada, teóricamente se permite hallar un punto de equilibrio donde se permite estudiar comportamientos futuros para los planes subsiguientes.
Para asegurar la completitud del análisis de riesgos es importante guías genéricas mundiales que permitan tener una referencia de cómo se mueven los riesgos en diversas plazas, por eso se utilizan referencias como ISO, AENOR, ASME, OSHA, entre otras, donde se permita descansar en normas estandarizadas y especificas.
Dentro de las metodologías operativas, uno de los mayores atractivos que presentan es que permite aumentar la seguridad de las instalaciones reduciendo los costes, tanto directos como indirectos, asociados al fallo de equipos, y que se pueden resumir en los siguientes:

Costes asociados a la pérdida de producción por parada de la instalación. En este sentido, permite adecuar el número de paradas de la instalación a las necesidades reales de inspección, y reducir el número de paradas no programadas que tienen su origen en fallos inesperados de sistemas o componentes.
Costes de mantenimiento e inspección
. La metodología permite optimizar los recursos necesarios de mantenimiento e inspección, destinando los mayores esfuerzos a aquellos equipos que presentan un mayor nivel de riesgo.
Costes derivados de accidentes. El conseguir mayores cotas de seguridad en la instalación permite reducir los costes asociados a reparar los daños que un posible accidente puede originar sobre las personas, los bienes y el medio ambiente.
Costes de seguros. Existe gran aceptación por parte de las aseguradoras de la utilización de este tipo de técnica, lo cual puede redundar en la obtención de importantes beneficios económicos para la instalación.
En cuanto a la evaluación de riesgos se ha de efectuar a nivel de expediente técnico de cada producto y de cada maquina, igualmente se deben diseñar planes de emergencia y contingencia cuando el riesgo desborde los controles, en este caso lo principal es proteger a la población en general, sus bienes y el medio ambiente, es allí donde los costes – beneficios sufren alteraciones importantes pero necesarias. Una de las técnicas mas utilizadas a nivel mundial porque abarca la totalidad de los aspectos expuestos anteriormente es la HAZOP, la cual realiza una indagación sistemática de todas las condiciones, generando protocolos específicos de control, utilizando por supuesto evidencias a través de árboles lógicos, curva de bañeras de los equipos, tasa de fallas, análisis fiabilisticos y de consecuencias, que aseguran una oportuna toma de decisión. Finalmente es recomendable que la gerencia de riesgos utilice la mejor técnica o metodología, que coadyuguen a un plan serio y eficiente de minimización de riesgos y un equilibrio en las inversiones hechas para tal fin.